A veces cierro los ojos y recuerdo a las personas que me han decepcionado, recuerdo a quienes me han intentado humillar o herir y mi mente me traslada a esos momentos: vuelvo a sentir que se me cierra el estómago, que se me tensa la cara y mi saliva se vuelve amarga.
El mundo, por unos minutos también.
Dejar ir
Qué fácil es decirlo, qué complejo es hacerlo, qué útil es lograrlo.
Útil sobre todo porque muchas veces pensamos que nuestro rencor castiga a quien “se lo merece”, cuando en realidad lo que hace es acaparar nuestra atención y nuestra energía, castigándonos únicamente a nosotros y alejándonos cada vez más de nuestros objetivos.
Ya sabes: “Where atention goes, energy flows” (a donde va nuestra atención, va nuestra energía).
Y sí, puede que no haya una fórmula mágica para dejar ir, pero yo siempre lo imagino como las manchas en la ropa: algunas salen fácil, otras requieren un poco más de esfuerzo, y hay unas que, bueno… nunca se van del todo. Nos acostumbramos tanto a ellas que ni las notamos. Pero, en todos los casos, la ropa hay que lavarla.
El Ritual: Revisemos la Cesta de Ropa Sucia
Vale, ¿y todo esto a qué viene? Pues a que es hora de revisar nuestra cesta de ropa sucia. Pero tranquila, es metafórico (aunque si quieres aprovechar para hacer colada mientras lees, tampoco te voy a juzgar).
Vamos a recordar la ropa que hemos usado el año pasado.
Vamos a revisar qué prendas están manchadas.
Vamos a lavar la ropa.
Jajaja, ¿te estás imaginando buscando un cesto de ropa literal? No te preocupes, a mí también me pasó al escribir esto. Pero confía: este ejercicio no requiere detergente, solo un poco de sinceridad contigo misma.
El Resultado: Espacio y Energía para lo Nuevo
Liberar estas manchas metafóricas no solo elevará tu nivel de conciencia, sino que te dejará con algo mucho más valioso: energía. Energía que puedes dedicar a lo que realmente importa, a construir, a soñar, a disfrutar.
Así que, ¿lista para empezar? Ve a tu cesta mental, saca las prendas, examínalas con cariño (sí, incluso esas que llevas arrastrando desde hace años) y prepárate para soltar lo que ya no te sirve.
Porque este año, la energía va donde tu atención decida llevarla. Y estoy segura de que hay algo mucho más brillante y hermoso esperándote ahí fuera.
Ahora sí, aquí va el ejercicio
Continúa leyendo con una prueba gratuita de 7 días
Suscríbete a El Club del Presente para seguir leyendo este post y obtener 7 días de acceso gratis al archivo completo de posts.